The Material Science Institute of Madrid, ICMM-CSIC, aims to generate cutting-edge knowledge on materials and processes crucial for addressing societal challenges
Víctor García Gisbert defiende su tesis en el ICMM el 1 de septiembre: "Hemos demostrado que el microscopio es capaz de medir cosas que antes no eran posibles"
El nuevo curso empieza en el Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid (ICMM - CSIC) con el cierre de algunos ciclos. Es el caso de Víctor García Gisbert, que este jueves 1 de septiembre defiende su tesis doctoral 'High Spatial Resolution Nanomechanical Mapping of Materials: From Proteins to Magnetic Media' [Mapeo nanomecánico de materiales de alta resolución espacial: desde proteínas hasta medios magnéticos]. Será a las 16.00, hora peninsular española, en el salón de actos del centro, aunque también podrá seguirse por zoom.
García Gisbert ha realizado su tesis centrada en el desarrollo de técnicas de microscopía de fuerza atómica para la medida de muestras a nanoescala. El joven, que lleva cinco años trabajando en el grupo de Ricardo García, 'Advanced force microscopy and nanolithography (ForceTool)', cuenta que se siente orgulloso de haber acabado su tesis y haberlo hecho consiguiendo un gran avance científico: "Hemos hecho evolucionar la técnica, hemos demostrado que el microscopio es capaz de medir cosas que antes no eran posible", dice.
Explicado esto para un público no científico, el investigador aclara que el microscopio de fuerza atómica utiliza una punta muy afilada con la que se puede medir la superficie de materiales con resolución nanométrica, es decir la milmillonésima parte de un metro. "La punta tiene un radio de solo unos pocos nanómetros, con lo que podemos tocar la superficie de estos materiales y medir interacciones que no pueden medirse con otros tipos de microscopio", indica.
Durante sus años en el Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid este joven investigador ha estudiado qué nuevos métodos puede tener este microscopio y cómo esto puede servir para medir propiedades mecánicas de fuerzas biológicas. En concreto, ha logrado desarrollar nuevos métodos para medir propiedades mecánicas de proteínas, colágeno o lípidos. Con su técnica ha podido ver cómo las propiedades mecánicas de ciertas sustancias cambian con el tiempo. Así ocurre, por ejemplo, con el colágeno: han observado cómo se vuelve más duro a medida que evoluciona en el tiempo.
"El método que había antes podía medir propiedades mecánicas con un minuto de resolución, es decir, una imagen por minuto; ahora podemos medir varias imágenes por segundo, con lo cual hemos mejorado la técnica por 100 respecto a resultados anteriores", cuenta orgulloso.
¿El futuro? "La idea es que una vez que hemos desarrollado la técnica podamos usarla en otras muestras con interés biológico más avanzado", explica. Mientras, este jueves defenderá su tesis con el orgullo de haber logrado un avance científico que "marcará el cambio en el futuro del desarrollo de la microscopía de fuerza atómica".