Autora: Capitolina Dáiz, catedrática de Sociología. Universidad de Valencia.
Cuándo: Martes, 11 de marzo de 2025 a las 12 PM (café a las 11.30AM)
Dónde: Salón de Actos, ICMM
Resumen: Se considera sesgo de género cualquier tendencia o desviación de la verdad en la recogida, el análisis, la interpretación y la publicación de datos, que puede dar lugar a conclusiones falsas. El sesgo puede producirse de forma intencionada o no intencionada. En la actividad académica encontramos sesgos en la investigación y sesgos en la evaluación. Los sesgos que practicamos individualmente, y a menudo como consecuencia de ellos, se producen también como sesgos sistémicos en las instituciones de investigación.
En la IA, los sesgos comienzan, no en los algoritmos, sino en los big data. Los big data son recopilaciones de la información que nuestra sociedad (incluida la ciencia y la tecnología) produce sobre sí misma. Dado que vivimos en una sociedad de supremacía masculina, los datos predominantes se refieren a hombres y a situaciones de discriminación de género (sutil o abierta). Con esos datos trabaja la IA. La buena noticia es que hay formas de revertir (al menos parcialmente) esos sesgos.
